Siempre ha existido un método terapéutico que se transmite con las manos: el masaje.
Se trata de uno de los métodos de cura conocidos, más antiguo.
Desde la antigüedad han sido reconocidas las virtudes y los beneficios del masaje sobre la salud del cuerpo y la mente de una persona. Durante miles de años hemos encontrado indicios y rastros del arte del masaje en todas las tradiciones, desde la antigua China hasta la India (Ayurveda), Grecia (Hipócrates, el padre de la medicina, habló sobre esto), Roma, El antiguo Egipto, hasta los nativos americanos, y así sucesivamente hasta hoy, diversificándose y modernizándose.
Pero el instrumento principal y más natural es siempre el mismo: las manos y las terminaciones nerviosas de los dedos, ya que es de donde comienza un diálogo con las células nerviosas del receptor, estimulando su potencial para regenerarse.
Ese toque terapéutico surgió de una intuición innata, amorosa y consciente, capaz de crear una alquimia que podría ayudarnos y tranquilizarnos. Y funcionó.
Este es el masaje intuitivo en la forma más simple y conocida.
Nos estamos preparando para aprender un verdadero arte del bienestar, aprendes a usar tus manos con un "efecto de escáner" para lograr una "lectura corporal".
Aprendes a reconocer donde están presentes:
El objetivo es poder identificar estos puntos y mejorar las condiciones nerviosas y musculares debido al estrés o la mala postura.
A esto le sigue el aprendizaje de un ligero masaje: un toque que actúa sobre las células nerviosas y al mismo tiempo en los meridianos, liberando los bloqueos de energía y, en consecuencia, la inflamación y las contracturas.
En la formación, se aprende también el lenguaje del cuerpo (postura, forma, etc.) así como el significado de los síntomas físicos, tanto en el origen como en relación con el estado emocional y los esquemas mentales de la persona.
El aprendizaje del masaje ligero produce una relajación profunda que promueve y acelera los procesos de reparación del cuerpo, es decir, crea un efecto beneficioso en todo el sistema nervioso y celular, ya que tonifica y aumenta los sentimientos de bienestar del receptor tanto a nivel físico como emocional.
Algunos de los beneficios del masaje:
Al aprender a usar las manos como un escáner del cuerpo, se desarrolla la "intuición del tacto" y, al mismo tiempo, aumenta la capacidad de aumentar los niveles de energía para poder usarlos y transmitirlos al receptor.
A través del contacto y la práctica, el operador entrena, despertando su sabiduría intuitiva y su memoria celular, recuperando así un talento innato.
El operador del masaje intuitivo comienza, con la práctica, a reconocer las señales de los bloqueos energéticos que el cuerpo manifiesta con síntomas y dolor.
Aprender la estimulación neural, entonces, es de gran ayuda para aquellos que desean emprender en el arte del tacto, ya que disciplinamos nuestra mente por medio de ejercicios de meditación y desarrollamos la intuición a través de los Cursos de Manos Sin Fronteras, esto permite que nuestras manos actúen con una precisión y sabiduría innata.
Y no sólo eso, porque el potencial "terapéutico" despertado con la Estimulación Neural nos permitirá aliviar los dolores de los demás y los nuestros.